Naves Industriales
Cuando un fabricante o empresa trasnacional de cualquier sector productivo desea expandir operaciones en México, puede decidir entre comprar o rentar una propiedad industrial de acuerdo con sus necesidades.
Y así como no hay dos compañías iguales (aunque sean del mismo ramo), la decisión entre la adquisición o renta de naves industriales depende tanto de la estrategia de negocio como de factores económicos del país en general y del mercado de inmobiliario industrial en particular. A continuación revisamos los pros y contras de cada opción.
Ventajas y desventajas de comprar una nave industrial
Ventajas de comprar una nave industrial
- Se crea plusvalía a largo plazo. El propietario tendrá libertad absoluta de vender la nave cuando se desee, o en su caso, utilizarla como colateral para refinanciar el negocio.
- Se puede subarrendar una o varias partes del inmueble. Comúnmente, una empresa que compra una nave industrial ocupa 51% de la misma, y el resto se puede rentar para crear una fuente secundaria de ingresos.
- Se tiene control total de la propiedad. Como dueña de una nave, la empresa no necesita negociar con el administrador o desarrollador del parque industrial. Además, los pagos del crédito inmobiliario son fijos, a diferencia de las rentas que son renegociables una vez que expira el contrato de alquiler.
- Se pueden deducir impuestos. Los gobiernos estatales y municipales apoyan con incentivos para atraer inversiones y fomentar el desarrollo industrial, así que los dueños pueden recibir deducciones sobre nómina o de otros gravámenes locales.
Desventajas de comprar una nave industrial
- Se requiere una fuerte inversión inicial. Además del precio de cierre, durante la compra se deben cubrir obligaciones fiscales, derechos y demás contribuciones como el impuesto sobre adquisición de inmuebles o traslado de dominio, gastos notariales, registrales y legales derivados.
- Se debe etiquetar un recurso constante mantenimientos, averías o incidencias. Los costos de mantenimiento y reparaciones de la nave recaerán sobre el comprador. Esto además requiere un mayor flujo de caja.
- Al ser un recurso dedicado puede haber pérdidas de liquidez o de capital. Ser arrendatario requiere un mayor flujo de caja, además de que existe el riesgo de potencial pérdida de valor en un mercado recesivo.
- Se debe contratar cobertura de seguro de responsabilidad civil. Ya sea que ocupes el edificio con tu planta o fábrica o subarrendes espacio, debes contratar pólizas de daños a terceros si alguien resulta herido en tu propiedad.
Ventajas y desventajas de la renta de naves industriales
Ventajas de la renta de naves industriales
- Mayor liquidez. Al no tener que pagar enganche, la empresa mantiene un mayor flujo de caja.
- Flexibilidad para cambiar de ubicación. Si la empresa prevé un rápido crecimiento en el corto o mediano plazo, puede rentar una ubicación estratégica con un precio de cierre alto y moverse en cuanto termine el contrato.
- Costos fijos mensuales. Amén de algún gasto por reparaciones mínimas, con la renta de naves industriales siempre tienes certeza financiera.
- Menos trámites y facilidad de permisos. Al contratar una plataforma especializada en renta de naves industriales, la empresa inquilina sólo debe hacerse cargo de los gastos de contratación y así empezar a usar su espacio casi de inmediato.
Desventajas de la renta de naves industriales
- No se generan rendimientos ni plusvalía. El inquilino no recibe rentas ni beneficios de una potencial valorización al alza de la propiedad.
- No se tiene control de la propiedad. El contrato de renta puede incluir restricciones, cláusulas de renegociación o cargos por terminación anticipada.
- Monto mensual de renta puede ser superior al de compra. En algunos mercados, las cuotas por crédito inmobiliario pueden ser más bajas que la renta mensual. Sin considerar arrendamientos triple neto (o NNN), donde el inquilino se ocupa del pago de seguros, impuestos y mantenimiento de instalaciones y áreas comunes.
- No aumentan los activos de la empresa. Si la nave se revaloriza, la empresa pierde una fuente potencial de ingresos o una oportunidad de inversión.